Este verano puede ser diferente si lo planificas con suficiente antelación. Cuando pensamos en qué hacer en Benidorm nos suena a sol y playa, a deporte acuático y a bañistas. Pero, ¿qué más ofrece la provincia de Alicante, llena de contrastes? Si te adentras con nosotros en el interior, encontrarás pueblos de origen árabe, volcados a la tierra, poseedores de un encanto único que harán de este verano algo nuevo para contar.
Pueblos de la Marina Baixa
Esta comarca, a pesar de tener zona costera, es una de las que ofrece los relieves más abruptos de Alicante. Las actividades de la zona se basan en la agricultura y encontrarás viñedos, almendros, olivos y huertas junto a pinares y lagunas, así como impresionantes pendientes y abismos, hasta llegar a la serenidad del río Segura. La cultura local tradicional aún basa las labores y faenas en recursos de antaño como pozos, hornos de cal, norias y molinos de agua.
Callosa d´en Sarrià
Este pueblo, de muy bien preservado casco antiguo, cuenta con las Fuentes de Algar. Este es un conjunto descendente de cascadas y pozas naturales con aguas muy frescas, a las que se ha dotado con un camino para llegar hasta la parte más alta, que pueden utilizar incluso personas mayores. Además puedes acercarte al Castillo de Tárbena, de origen musulmán y construido en el siglo XII, que se encuentra en una elevación cerca del poblado.
El Dino Park Algar es un parque temático de dinosaurios que cuenta con elementos robóticos estáticos y móviles y cine en 3D. Es un espacio educativo que además te brinda la belleza de un jardín botánico con plantas xerófilas.
Orxeta
Al pie de la sierra del mismo nombre, este pueblo se dedica al cultivo del almendro y del olivo. Existe, como en otras poblaciones de la zona, un castillo musulmán bien conservado. Las excursiones a la sierra de Orxeta, pedregosa y agreste, permiten contemplar la vista de la sierra Aitana y la costa alicantina. Sus calles de piedra que evocan el ancestro morisco te llevarán al Palacio de la Orden de Santiago o a la iglesia de San Jaime Apóstol.
Si lo deseas, puedes acercarte a conocer la zona limítrofe, la Marina Alta, que cuenta con el parque natural del Macizo del Montgó, de 753 metros de altura, la última estribación de las cordilleras Béticas. Además, en la cima encontrarás un mirador de espectacular vista al Peñón de Ifach y al Golfo de Oliva. Si tomas el camino de la antigua colonia agrícola encontrarás la Cueva del Agua, que desde los tiempos del Imperio Romano es fuente permanente del líquido.
Las leyendas, restos históricos y lugares de ensueño de los pueblos de la Marina Baixa completan el cuadro alternativo para cuando pienses en qué hacer en Benidorm. Ven a disfrutarlo en compañía de tus amigos y familiares.