Altea es una de las joyas más apreciadas de la Costa Blanca. Situada a once kilómetros de Benidorm, se trata de un lugar mágico, con gran encanto, que contiene en un pequeño territorio toda la esencia del Mediterráneo. Paseando por sus empinadas y estrechas calles empedradas sentirás lo mismo que experimenta el viajero que transita por la localidad gerundense de Cadaqués o la maravillosa ciudad marroquí de Asilah. La brisa del mar llena de gozo al turista, que se contagia de la hermosura de sus casas blancas con tejados azules y de las flores en los balcones. Un auténtico deleite para los sentidos.

Qué ver en Altea

Altea es una pueblo para recorrer a pie, en el que cada rincón esconde una imagen para el disfrute. Se recomienda pasear por él a la luz del día y durante la noche, puesto que la estética varía notablemente y en ambos casos exhibe una gran belleza. A continuación señalaremos los principales puntos de interés de la zona, para que exprimas al máximo tu visita:

Iglesia de Altea

La llamada Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo muestra una estética mediterránea muy original, coherente con la imagen global del pueblo. Se encuentra situada en la plaza principal, lugar de mercados de artesanía durante el verano y zona bohemia por antonomasia de la Costa Blanca. Como nota curiosa, en este lugar se encuentra la facultad de Bellas Artes, un lugar por el que pasaron artistas como Rafael Alberti o Vicente Blasco Ibáñez.

Iglesia Ortodoxa Altea Calpe

A medio camino entre Altea y Calpe encontramos la Iglesia Ortodoxa, un lugar de peregrinaje para los seguidores de esta facción del catolicismo. Su arquitectura destaca por su gran originalidad y gran sentido estético.

Playa de El Cap Negret

​Las playas son otro de los grandes atractivos de Altea. La de El Cap Negret, la Olla y Mascarat destacan sobremanera por encima del resto. Si visitas la zona en verano, disfrutarás de un reconfortante baño en sus aguas cristalinas.

Dónde comer en Altea

Altea es un lugar ideal para el turismo gastronómico. La comida mediterránea se prepara en esta zona como en pocos sitios en las Costa Blanca, y se ofrecen al visitante lugares de restauración de una enorme calidad. Las paellas, el pescado y el marisco son las especialidades de Altea, que dispone también de cartas de comida italiana en restaurantes especiales para vivir una velada romántica junto a tu pareja.

Uno de estos lugares destacados es el restaurante Sabor, ubicado justo al lado del Club Náutico. Además, son muy valorados por los clientes el restaurante El Perro Negro y la Costera de Altea. Para después de la comida o cena, harás muy bien en visitar la famosa tetería Jardín de los Sentidos.